Grabado con ácido

En esta técnica, se usa ácido hidrofluórico para trabajar el cristal de forma creativa con un tipo de vidrio especial llamado 'plaqué' (del francés): un cristal compuesto de una base translúcida sobre la cual se funde una capa muy fina de cristal coloreado. La fabricación de este vidrio soplado a boca requiere un alto nivel de especialización, por lo cual es bastante caro. Los franceses y los alemanes son famosos por su fabricación y los mejores vidrios de plaqué vienen de estos países.
Con la técnica de grabación al ácido, se 'rasca' el diseño, quitando la capa de color para revelar la capa incolora.

Se puede ver claramente el trabajo de la grabación con ácido en los encargos del mandala (foto 1) y el regalo de boda 'felicidad' (foto 2).En el mandala, la pieza circular central empezó siendo un círculo rojo antes de la grabación. Después, la pieza fue pintada y cocida. Posteriormente, se aplicó amarillo de plata con su respectiva cocción (véase 'amarillo de plata'). De forma similar, la pieza circular del regalo de boda empezó siendo un circulo azul.

Para la grabación, hay que colocar plástico de forrar (como el que se usa para libros) y con un bisturí, se quitan las partes donde va a actuar el ácido. Las partes protegidas se mantienen sin cambios, ya que el ácido no puede penetrar en el plástico.
El ácido hidrofluórico es increíblemente corrosivo y peligroso. Su uso requiere ropa protectora especial y una máscara de respiración con su propia alimentación de aire. Una máscara con filtro no hace nada más que absorber el ácido, transmitiéndolo a los pulmones. Aunque el ácido está diluido varias veces, puede quemar la piel gravemente, y el tratamiento requiere una crema antídoto especial.
Usar la técnica de grabación con ácido hidrofluórico es un trabajo arriesgado pero los resultados valen la pena. Las vidrieras 'árbol de vida' (foto 3) tienen casi todas las piezas grabadas con ácido.